La Estructura

La familia Martorana compró la propiedad en 1892 a una noble inglesa, Lady Florence Trevelyan. Villa Paradiso se alza frente al jardín público de Taormina, del cual originalmente formaba parte como una estructura anexa.

Inicialmente utilizado como una tienda de vinos, el edificio fue reconvertido en pensión con el nombre "Villa Paradiso" en 1912, comenzando así a acoger a viajeros de toda Europa. A menudo se trataba de bohemios sin recursos que, al no poder pagar su estancia, dejaban como pago cuadros: obras que aún hoy se pueden admirar en los salones del hotel.

A principios de los años cincuenta, Salvatore Martorana y su esposa Esther tomaron las riendas de la gestión, elevando aún más el prestigio del hotel, que se convirtió en un referente de la hospitalidad en Taormina y en un punto de encuentro para los personajes que marcaron la época dorada de la Perla del Jónico.

Hoy, ya en su quinta generación, la familia Martorana es una de las dinastías hoteleras más longevas de Sicilia.

Esta herencia se refleja en una hospitalidad auténtica y cálida, que conserva todo el encanto y las características arquitectónicas originales del hotel, con salones sugerentes y habitaciones elegantemente decoradas.

Cada mueble, cada cuadro, cada grabado y cada alfombra cuentan la historia de este lugar y de la familia que le da vida.